El partido comenzó como se esperaba, con un equipo local buscando siempre la portería contraria y un equipo visitante que esperaba en defensa y buscaba la contra para cerrar la eliminatoria, si es que no estaba ya cerrada. A los 6 minutos de encuentro ya tuvo la Real una ocasión por parte de Estrada con un disparo que se fue alto. Después de la ocasión local, llegó el único acercamiento de los andaluces en la primera media hora de encuentro, con un disparo que rechazó bien Eñaut Zubikarai, hoy titular. A los 17 minutos de encuentro llegó la primera ocasión clara de la Real, con una vaselina de Agirretxe que casi entra. Tres minutos mas tarde llegaría el primer gol donostiarra, después de un pase de Rubén Pardo que controló Griezmann en fuera de juego y batió por bajo al portero cordobesista. En estos momentos se creía mas que nunca en la remontada. La Real seguía buscando el gol que les llevara a la prorroga, y casi lo consigue después de que Agirretxe se quedara solo ante el meta visitante, pero éste envió el balón a córner. Minutos mas tarde llegaría la última ocasión del Córdoba en la primera mitad, con un remate blando de Abel Gómez que atrapó sin problemas el portero donostiarra. Antes de que llegáramos al descanso tendríamos dos ocasiones mas para aumentar el marcador, con un remate de cabeza de Griezmann que rozó el larguero y un disparo del Chory Castro que volvió a enviar Saizar a corner. Posteriormente el partido se fue al descanso, con la esperanza de que el equipo saliera a por todas en el segundo acto.
Pero la segunda mitad fue totalmente distinta a la primera. Aquí vimos una Real Sociedad que no creó peligro alguno al Córdoba salvo en algunas ocasiones. Poco después de empezar se produjo el primer cambio en la Real, salía del campo Zurutuza y entraba Xabi Prieto. La Real tuvo en dos minutos dos ocasiones para conseguir el ansiado gol, pero Chory y Pardo no acertaron con encontrar la portería. En el minuto 59 el Córdoba dió el primer aviso, con un potente disparo de Dubarbier, que, por cierto, le ha dado la tarde-noche a Estrada, que despejó bien a córner el portero txuri urdin. En el minuto 63 se acabó la eliminatoria, tras una falta que bota el Córdoba desde la banda y que Kiko Olivas, libre de marca, remata al fondo de la portería, poniendo el 1-1 en el marcador y el 1-3 en la eliminatoria. Montanier se vió que tenía la eliminatoria perdida e hizo una cacicada, como es quitar a uno de los dos centrocampistas que tenía, a Illarra, para meter a Ifrán. Y por si fuera poco, 6 minutos mas tarde del gol del Córdoba, llegó el segundo de los blanquiverdes, con un disparo ajustado al palo de Dubarbier después de que la Real estuviera defendiendo con solo dos jugadores. A partir de aquí la Real tenía que meter 4 goles, algo imposible si no hablamos de un equipo como el Mallorca. En el minuto 78 el francés hizo el último cambio, quitó a Griezmann y dió entrada a Vela. A dos minutos del final llegó el gol de la honra (en la eliminatoria) para la Real, obra de Agirretxe. Hasta aquí llegaría otra nefasta actuación en la Copa del Rey para el equipo realista.
Al final del partido, y desde que el Córdoba metió su segundo gol, la grada volvió a corear el tan famoso cántico de "Montanier Dimisión". Ahora la Real ya no tendrá que jugar mas entre semana, y jugará cada 7 días, algo importante para un entrenador que busca que sus jugadores estén siempre "frescos". En cuatro días volveremos a nuestra competición, la Liga, y visitamos Mestalla para enfrentarnos al Valencia el sábado a las 18h.
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